Este es uno de los volcanes activos más importantes del mundo y tiene un historial que lo cataloga como uno de los más destructivos y aterradores de Europa.
Actualmente, en plena actividad está prohibido subir a su cima. Las explosiones y las emisiones de ceniza han aumentado, principalmente en los cráteres de la cumbre.
El Etna en acción
Según expertos, la erupción subterminal podría extenderse por semanas.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV), la actividad inició la tarde del sábado con un flujo de lava que emergió a unos 3.000 metros sobre el nivel del mar, específicamente entre los cráteres Bocca Nuova y Sudeste.
Aunque en días previos se habían registrado algunas emisiones de ceniza y explosiones estrombolianas, en la actualidad la actividad infrasónica es prácticamente nula.
El INGV ha elevado el código de color de aviación a naranja, una medida preventiva ante la posibilidad de cambios en la actividad volcánica. Sin embargo, el último informe confirma que no se ha generado una nube de ceniza, por lo que no se esperan afectaciones en el tráfico aéreo.
Este tipo de fenómenos pueden prolongarse por días o incluso semanas, dependiendo de la evolución del magma y las condiciones internas del volcán.