El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, amenazó este lunes con implementar aranceles adicionales a China como respuesta del 34% aplicado por el gigante asiático a todos los productos importados desde la nación norteamericana.
“Si China no retira su aumento del 34% sobre sus abusos comerciales, ya prolongados para mañana, 8 de abril de 2025, Estados Unidos le impondrá aranceles adicionales del 50% a partir del 9 de abril”, escribió en Truth Social.
“¡Además, se cancelarán todas las conversaciones con China sobre las reuniones que nos han solicitado!”, refirió el jefe de estado norteamericano.
De implementarse los aranceles estadounidenses sobre las importaciones procedentes de China, estas alcanzarían un total del 104%. Los nuevos impuestos se sumarían a los aranceles del 20% anunciados como castigo por el supuesto tráfico de fentanilo y al 34% anunciado la semana pasada, de acuerdo a cifras de AP News.
La agencia también reporta que esto no solo podría aumentar los precios para los consumidores estadounidenses, sino que también podría incentivar a China a buscar alianzas más estrechas con otros socios comerciales.
Pánicos en los mercados
Este lunes los mercados bursátiles del mundo abrieron con nuevas caídas producto de la incertidumbre que genera esta nueva guerra arancelaria de Trump.
Al mediodía de este lunes, el Promedio Industrial Dow Jones cayó 750 puntos, o un 2%. El S&P 500 se había desplomado un 1,5% y el Nasdaq Composite había bajado un 1,2%. La caída de los mercados se revirtió brevemente por la mañana tras un informe falso que indicaba que Trump estaba considerando pausar sus planes arancelarios.
El viernes el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, advirtió que esta ola de gravámenes podría aumentar la inflación. Mientras que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von Der Leyen, manifestó que la Unión Europea se centraría en el comercio con otros países, afirmando que existen «grandes oportunidades» en otros lugares.
El jefe de estado norteamericano ha acusado a otros países de » aprovecharse de Estados Unidos», y culpo a los «antiguos líderes estadounidenses de permitir esto», manifestó.
