Las sedes diplomáticas en Lisboa (Portugal), Frankfurt (Alemania), Medellín (Colombia), Vigo (España) y San José (Costa Rica) fueron atacadas, después de la juramentación del presidente, Nicolás Maduro.

El Canciller venezolano, Yván Gil, informó que se trata de una «acción coordinada por los comanditos del fascismo desquiciado» que buscan causar el mismo daño a las sedes diplomáticas que quieren hacerle a Venezuela.
«El odio fascista inoculado, estimulado y protegido por años en el exterior, es la principal causa de estas agresiones», señaló Gil en su canal de Telegram.
El titular de la cartera de Relaciones Exteriores solicitó a las autoridades de Lisboa, Frankfurt, Medellín, Vigo y San José celeridad en las investigaciones para dar con los responsables; «y que se garantice la integridad de nuestras instalaciones como lo establece la Convención de Viena», agregó Gil.
