
En los últimos días, los mercados financieros reaccionaron a una creciente preocupación ante la posibilidad de una recesión en Estados Unidos, atribuida a las recientes políticas implementadas por el presidente Donald Trump. Este fenómeno, bautizado por algunos analistas como ‘Trumpcesión‘, ha generado volatilidad en los mercados y ha encendido las alarmas sobre el futuro económico del país.
El inicio de la semana estuvo marcado por una significativa caída en los principales índices bursátiles de Wall Street. El Dow Jones se desplomó 900 puntos (2,1%), mientras que el S&P 500 y el Nasdaq Composite registraron descensos del 2,7% y 4%, respectivamente. El sector tecnológico fue uno de los más afectados; empresas como Tesla vieron una disminución del 15% en el valor de sus acciones, y gigantes como Apple, Microsoft y Amazon también experimentaron pérdidas considerables.
La administración Trump adoptó una postura proteccionista del mercado interno de EE.UU contraviniendo sus históricas posturas liberales en materia comercial, implementando aranceles a diversos países incluso siendo aliados, con especial énfasis en China. Estas medidas han desencadenado una guerra comercial que ha generado incertidumbre en los mercados globales.
Asimismo, la falta de avances en las negociaciones con la Unión Europea ha sido motivo de preocupación. Bruselas ha acusado a la administración Trump de no implicarse en la búsqueda de un acuerdo que evite la imposición de nuevos aranceles, lo que podría afectar negativamente las exportaciones estadounidenses debido a posibles represalias de otras potencias.
Señales de alerta en la economía real
Más allá de los mercados financieros, existen indicios de que la economía real podría estar resintiendo estas políticas. Delta Air Lines ha reportado una disminución en la demanda doméstica y un descenso en el gasto de los consumidores, lo que refleja una posible contracción en la confianza del consumidor.
Además, se ha observado una caída en la inversión empresarial y un aumento en el déficit comercial, alcanzando cifras récord que no se veían desde hace años según reseñó el medio The Guardian.
Economistas y analistas han expresado su preocupación por la dirección que están tomando las políticas económicas de la administración Trump. La combinación de aranceles, recortes en el gasto federal y una estrategia económica percibida como impredecible podría desestabilizar el frágil equilibrio económico actual.
Algunos expertos advierten que estas medidas podrían conducir a una recesión, especialmente si se consideran ejemplos históricos donde políticas similares resultaron en contracciones económicas.