Inició formalmente una nueva etapa del diálogo entre Estados Unidos y Venezuela. La decisión de EEUU de enviar a Grenell a suelo venezolano desarma e implosiona a la oposición golpista venezolana, a la que hace pocos días Trump le cortó la financiación vía USAID.
A su llegada a suelo venezolano el Enviado Especial del Presidente Donald Trump, Richard Grenell, fue recibido por el Presidente Maduro, en el Palacio de Miraflores, quien le mostró la espada de Bolívar, que consagró su vida y su fortuna a la causa de la independencia en América.
La espada, símbolo de la Independencia, es la original que usó el Libertador durante las campañas y combates y está incrustada de diamantes. Sus luchas culminaron con la independencia de países como Venezuela, Bolivia o Colombia del imperio español.


Las dos banderas se vieron desplegadas, de igual a igual. Un símbolo poderoso de respeto entre estos pueblos.

El clima distendido y la recepción amable que los venezolanos suelen demostrar en su rol de anfitriones, también se vio en este encuentro del viernes 31 de enero en Caracas.
El presidente Maduro plantea “Agenda Cero” con el Gobierno de Estados Unidos, basada en el respeto a la soberanía y autodeterminación de los pueblos.