Chevron está tratando de proteger la licencia especial de Estados Unidos que le permite operar en Venezuela, argumentando que China y Rusia ganarán influencia, tanto en el país como en el hemisferio occidental, si la administración de Donald Trump obliga la empresa a retirarse.
Durante una entrevista con el medio Financial Times, el director ejecutivo de Chevron, Mike Wirth, dijo que la compañía se comunicaría con la Casa Blanca, después de que Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, dijera que la licencia debería reconsiderarse.
Wirth aseguró que Chevron operaría de conformidad con la ley estadounidense y “se mantendría al margen de la política” y agregó que la eventual salida de Venezuela de la petrolera estadounidense ocasionaría una expansión de las compañías petroleras estatales de países rivales.
“En Venezuela, en particular, lo que se ha visto que cuando los países de Occidente se van, se ha visto a empresas de China, de Rusia, aumentar su presencia como resultado”.
Director ejecutivo de Chevron, Mike Wirth
Wirth comentó que estudios de terceros sugirieron que la economía de Venezuela se vería afectada si Chevron saliera y podría impulsar flujos migratorios hacia Estados Unidos.
Estos comentarios los hizo poco antes de que Trump enviara a Venezuela su encargado de misiones especiales, Richard Grenell, tras solicitar una audiencia formal al presidente Nicolás Maduro, quien aceptó la recepción del funcionario estadounidense y propuso construir relaciones de respeto con EEUU.