El Congreso de Estados Unidos congeló 50 millones de dólares que estaban destinados a financiar a la extrema derecha en Venezuela, según reveló el excandidato presidencial opositor, Luis Eduardo Martínez.
Esta decisión marca un giro significativo en la política estadounidense hacia Venezuela, poniendo fin a años de apoyo financiero a grupos opositores liderados por el prófugo de la justicia, Juan Guaidó, quien en el 2019 recibió millonarios fondos de EEUU tras autoproclamarse en una plaza pública como «presidente encargado».
Martínez, miembro del partido Acción Democrática, detalló que el año pasado se aprobaron 650 millones de dólares para el «fondo del rescate de la democracia venezolana».
Estos fondos se destinaban a financiar instituciones ficticias, como Asamblea Nacional, Procuraduría, Contraloría, Tribunal de Justicia y Cancillería, además de partidos políticos no legalizados, señala la Iguana.tv
La decisión de congelar estos fondos, tomada hace aproximadamente dos semanas, coincide con la nueva administración del presidente Trump, quien ha ordenado una pausa de al menos 90 días en la inyección del dinero.
Martínez destacó que si la Administración Trump hace una evaluación seria sobre el destino de esos recursos, se darán cuenta de que “esos reales se perdieron, botaron esos reales”.