La candidata presidencial Luisa González (Revolución Ciudadana) ratificó este viernes su denuncia de un «fraude sistemático» durante la segunda vuelta electoral del 13 de abril en Ecuador. Aseguró que presentará pruebas de «manipulación de actas» y «alteración de resultados», incluyendo 1.984 actas sin firmas conjuntas y 1.526 con inconsistencias numéricas.
Detalles técnicos y observación internacional
Un informe de la Misión de Observación de la OEA confirmó fallas críticas: la tinta de las papeletas se traspasaba al doblarlas, causando anulaciones indebidas. Rafael Correa, exmandatario y líder de Revolución Ciudadana, señaló que esto explicaría la «disminución artificial de votos» de González en ciertas regiones.
Encuesta postelectoral reveladora
La consultora argentina TresPuntoZero publicó un sondeo (14-16 de abril) donde el 52,7% de los encuestados afirmó que votaría por González en caso de repetirse los comicios. Correa calificó el estudio como «extremadamente serio» y anunció un informe detallado de irregularidades.
Irregularidades estructurales
González denunció:
- Uso de recursos públicos por parte del presidente Daniel Noboa durante la campaña.
- Entrega de bonos sin sustento técnico que «ponen en riesgo la dolarización».
- Cambios de recintos electorales bajo estado de excepción.
Respuesta institucional en entredicho
El CNE declaró concluido el procesamiento de actas, pero González exige «auditoría pública» tras detectar 1.582 actas con resultados «desviados del promedio histórico» de sus recintos. La OEA y UE validaron el proceso, aunque cuestionaron el «uso ambiguo de licencia presidencial» por Noboa.
Próximos pasos
Revolución Ciudadana anunció impugnación formal de los resultados, basada en lo que califican como «el fraude más grotesco de la historia democrática ecuatoriana.