El ministro de Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, denunció los malos tratos sufridos por migrantes venezolanos a manos de las autoridades estadounidenses.
En sus declaraciones, Cabello relató que algunos migrantes fueron mantenidos «tres días sin comer» y «esposados», lo que calificó como «tortura, malos tratos y violación de derechos humanos».
El ministro mencionó que las primeras en denunciar la falta de comida fueron 13 mujeres, quienes «tenían marcas de las esposas de las muñecas«. Cabello destacó lo «terrible» que resulta el trato hacia los detenidos, añadiendo que «pierden todos sus derechos, hasta el derecho a la vida porque recuerda que allá (EE.UU.) hay pena de muerte».
También relató que varios migrantes se encontraban en sillas de ruedas, y en una conversación con tres de ellos, le relataron lo sufrido: «me golpearon los guardias, donde estaba detenido«.
Además, denunció el caso de otro migrante que había sufrido un accidente y no había recibido atención médica. «Es deshumanizado todo», concluyó Cabello.
El ministro aprovechó para criticar a la extrema derecha venezolana, señalando que «después ellos se molestan porque uno los recibe con cariño».