Luego de que la Casa Blanca anunció la eliminación del programa migratorio CHNV, conocido como Parole Humanitario, más de medio millón de cubanos, venezolanos, nicaragüenses y haitianos se enfrentan a una carrera contra el tiempo.
El beneficio, implementado durante el gobierno de Joe Biden, le permitía a los migrantes de esos países residir y trabajar temporalmente en Estados Unidos con el apoyo de un patrocinador.
Ahora, con la nueva política que se aplicará a partir del 24 de abril, tendrán pocas alternativas para quedarse en el país norteamericano.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) afirma que aquellos que no tengan otra base legal para permanecer en Estados Unidos, como una petición de asilo o una solicitud de visa U para víctimas de crímenes, deberán abandonar el país o serán puestos en la mira de los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) para su deportación.
Señala asimismo que ese beneficio “no ha sido necesario para reducir los niveles de inmigración ilegal, no cumplen sus propósitos previstos y son incompatibles con los objetivos de política exterior” de la Casa Blanca.
¿Qué es el parole humanitario?
El parole humanitario es una figura legal con una larga historia y ha sido utilizada por gobiernos de distinto signo en múltiples ocasiones a lo largo de las últimas siete décadas.
A mediados de 2024, la administración Biden creó un programa para los nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela para intentar reducir la inmigración ilegal.
Unos 530 mil cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos que lograron ingresar legalmente a Estados Unidos durante el gobierno de Joe Biden, se enfrentan ahora a la posibilidad de ser detenidos y deportados.
Organizaciones critican revocación del programa
Las críticas de las organizaciones promigrantes por la revocación de esta medida no se han hecho esperar.
En declaraciones enviadas a Efe, Todd Schulte, presidente de FWD.us, destacó que con la cancelación del beneficio migratorio se eliminan hasta 240.000 empleos con permisos de trabajo de la fuerza laboral estadounidense, incluidos 40.000 en la industria manufacturera, 30.000 en el sector del ocio y la hostelería, 30.000 en la construcción y 30.000 en el sector sanitario.