Este segundo derrame de combustible en menos de 10 días en Ecuador afectará la vida en ríos de la Amazonía

Una mancha de combustible se desplaza con la corriente de las aguas del río Quijos. La prensa local y las autoridades ecuatorianas informaron de la rotura registrada en el poliducto Shushufindi-Quito, este sábado 22 de marzo de 2025, en el kilómetro 137, en el sector San Francisco de Borja, cantón El Chaco, en la provincia de Napo.
A pesar de que los ministerios de Energía y Minas y el del Ambiente, Agua y Transición Ecológica emitieron sendos comunicados, no especificaron sobre la cantidad de combustible derramado. La prensa local asegura que el tipo de combustible derramado podría ser gasolina base nivel 3, conocida como jet fuell.
Afectación a la generación de electricidad
Hay instalada una barrera flotante en el río Coca para intentar evitar que el combustible llegue a las aguas de captación de la central hidroeléctrica Coca Codo Sinclair, la mayor central hidroeléctrica del país, con el fin de proteger la infraestructura electromecánica.
Las autoridades informaron que si detectan algún riesgo evaluarán suspender la operación de esa central eléctrica y que en caso de que salga de operación no habrá racionamientos de energía eléctrica debido a que las plantas termoeléctricas y barcazas suministrarán la energía necesaria al país.

¿Pudo ser provocado?
En el comunicado, el ministerio de Energía y Minas dice que “rechaza cualquier intento de afectar a propósito la infraestructura del Estado”, pero no hace ninguna acusación ni entrega detalles de la insinuación de que la rotura del poliducto pudo ser provocado.
El medio local Radio Pinchincha publicó que según “pobladores del cantón El Chaco, la rotura del poliducto habría respondido al hundimiento de tierra en el sector, a causa de las intensas lluvias registradas en la zona”.

El segundo evento en 10 días
Los pobladores de Esmeraldas, en Ecuador, aún están sufriendo las consecuencias de uno de los mayores desastres ambientales que ha enfrentado ese país, cuando el pasado 13 de marzo se derramaron unos 38 mil de barriles de petróleo (según autoridades nacionales) en el río Esmeraldas a causa de la rotura del oleoducto Transecuatoriano (SOTE).