La Iglesia Católica de El Salvador dio un paso significativo en su oposición a la minería metálica al presentar 150,000 firmas ante la Asamblea Legislativa, solicitando la derogación de la reciente Ley General de Minería Metálica.
El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar Alas, acompañado por el cardenal Gregorio Rosa Chávez y otros líderes religiosos, encabezaron la entrega de las firmas recolectadas en parroquias de todo el país. Esta acción refleja la preocupación de diversos sectores sobre los posibles impactos ambientales y sociales de la minería en el país previstos en las leyes que está impulsando el presidente Nayib Bukele.
Escobar Alas enfatizó que la iniciativa busca el bienestar de toda la nación, expresando que «si se da la extracción minera en El Salvador, sería muy triste y saldría afectado el país entero».
La Ley General de Minería Metálica, aprobada en diciembre de 2024, levantó una prohibición de siete años sobre la minería de metales en El Salvador. Esta decisión ha generado críticas de ambientalistas y líderes religiosos, quienes advierten sobre posibles daños irreparables a los ecosistemas y a la salud pública.
En el pasado, el presidente Bukele ha defendido la reactivación de la minería metálica en el país, calificando las preocupaciones sobre su impacto ambiental como «mentiras apocalípticas» y asegurando que el gobierno llevará a cabo la minería de manera responsable y sostenible.
La Iglesia Católica espera que los legisladores consideren la petición ciudadana y deroguen la ley, priorizando la protección del medio ambiente y la salud de la población.