Steve Witkoff, reconocido magnate inmobiliario y aliado cercano del presidente Donald Trump, ha emergido como una figura clave en la diplomacia internacional tras ser designado como enviado especial de Estados Unidos para Oriente Medio. A pesar de no contar con experiencia diplomática previa, su papel en las negociaciones de alto el fuego en Gaza y sus recientes conversaciones con Rusia sobre el conflicto en Ucrania lo han colocado en el centro de la política exterior estadounidense.
¿De los negocios inmobiliarios a la diplomacia internacional?
Witkoff, fundador y presidente del Grupo Witkoff, ha construido un imperio inmobiliario con adquisiciones emblemáticas como el Woolworth Building y el Daily News Building en Nueva York. Con formación en derecho y un instinto para la inversión, su éxito en el mundo empresarial lo llevó a establecer estrechos lazos con Donald Trump, quien lo incluyó en el Grupo de la Gran Recuperación Económica Americana durante la pandemia de COVID-19.
Su cercanía con Trump quien lo ha catalogado como una «voz implacable a favor de la PAZ», ha sido determinante en su ascenso a la política internacional. En noviembre de 2024, el entonces presidente electo lo nombró Enviado Especial para Oriente Medio, una decisión que generó sorpresa y críticas por su falta de antecedentes diplomáticos.
Sin embargo, hay señalamientos de que ese nombramiento podría tener que ver con que Trump ha propuesto un plan para la Franja de Gaza que busca «reurbanizar» la zona y transformarla en una «Riviera del Oriente Medio» tras una eventual anexión por parte de Estados Unidos. Este plan contempla la reubicación de una parte significativa de la población palestina de Gaza hacia países como Egipto y Jordania.
Su rol como enviado especial han generado especulaciones sobre su posible participación en la implementación de proyectos relacionados con la reconstrucción y desarrollo inmobiliario de Gaza si Trump logra su anexión.
En el reciente escándalo del plan de Trump de ocupar Gaza y convertirla en la «Ribiera Gaza» desplazando a sus habitantes, muchos señalan que la razón de la designación del «super enviado» Witkoff es más un asunto de negocios de inversión inmobiliaria
En enero de 2025, Witkoff logró su primer éxito como mediador al facilitar un alto el fuego entre Israel y Hamás. El acuerdo permitió la liberación de varios rehenes y la suspensión temporal de las hostilidades.
A pesar de los avances, la tregua en Gaza sigue siendo frágil. Las tensiones persisten y la comunidad internacional observa con cautela si el “super enviado” de Trump podrá consolidar una paz más duradera en la región.
Intervención en Ucrania: Conversaciones con Moscú
Más recientemente, Witkoff ha dirigido su atención a la guerra entre Rusia y Ucrania. A finales de febrero, viajó a Moscú para entablar conversaciones directas con el presidente Vladímir Putin, en un intento de negociar una tregua de 30 días promovida por Washington.
Sin embargo, el Kremlin ha expresado escepticismo sobre la viabilidad del alto el fuego por el sin número de tareas pendientes por discutir y a las cuales ha hecho referencia en rueda de prensa el presidente Putin.
«Estados Unidos plantea una tregua temporal, pero lo que necesitamos es una solución a largo plazo», declaró Putin tras su reunión con Witkoff. Kiev, por su parte, ha manifestado interés en la propuesta, aunque continúa exigiendo garantías de seguridad a EEUU y la UE.
La designación de Witkoff ha generado reacciones mixtas entre analistas y políticos. Mientras algunos destacan su capacidad para negociar acuerdos complejos en el sector privado, otros critican su falta de experiencia en geopolítica.
«Colocar a un empresario sin trayectoria diplomática en una crisis internacional es una apuesta arriesgada», señaló un exfuncionario del Departamento de Estado a The Huffington Post. Sin embargo, sus partidarios sostienen que su estilo pragmático y su cercanía con líderes clave pueden ser una ventaja en un momento en que las soluciones tradicionales han fracasado.