La policía de Argentina reprimió este miércoles una movilización convocada por los jubilados, a la que se sumaron aficionados del fútbol, sindicatos y agrupaciones de izquierda.
Los agentes de la policía se colocaron en diferentes puntos de los alrededores de la sede del Congreso, en el centro de Buenos Aires, y lanzaron gases lacrimógenos, balas de goma y chorros de agua desde camiones contra los asistentes a la marcha de protesta, donde había ancianos, mujeres y jóvenes.
La movilización fue convocada para mostrar apoyo a los jubilados que cada miércoles protestan a las puertas del Congreso en reclamo de una actualización de las pensiones y la restitución de la cobertura de medicamentos que finaliza a finales de marzo.




Fotos diarios Ámbito y Página 12 de Argentina.