Se están evaluando los daños, pero se teme que el derrame del combustible puede ser devastador para la vida salvaje del estuario del Humber

La colisión entre el petrolero de bandera estadounidense Stena Immaculate y el portacontenedores de bandera portuguesa Solong, ha desatado una alarma medioambiental en el mar del Norte, frente a la costa británica, mientras las causas del incidente, sin víctimas mortales, está en investigación.
Tras el choque, 36 personas fueron rescatadas y ninguna de ellas fue hospitalizada, según informa la cadena británica BBC.
Sin embargo, uno de los 14 miembros de la tripulación del carguero Solong está desaparecido, y están realizando esfuerzos para localizarlo.
El riesgo ecológico
Imágenes publicadas por BBC, mostraron las dos embarcaciones rodeadas de un espeso humo negro y varios puntos sobre el mar en llamas.
La preocupación está ahora en el posible impacto ecológico del accidente.
El combustible para aviones que se está derramando en el mar del Norte, tiene un punto de ebullición alto, por lo que se evapora lentamente. Además, es relativamente tóxico, por lo que la vida marina que entre en contacto con él puede morir.
Ese combustible se puede descomponer en el agua por acción de bacterias y, según las imágenes, una parte ya se ha incendiado y ha sido quemado.
El medio cita a Alastair Grant, profesor emérito de ecología en la Universidad de East Anglia, quien advierte que «el combustible para aviones es aproximadamente 50 veces más tóxico para la vida acuática que el combustible diésel, que a su vez es más tóxico que el petróleo crudo».
Un representante de la organización internacional Greenpeace Reino Unido, aseguró que el impacto al medio ambiente estará condicionado a factores, como el tipo de petróleo vertido, a la cantidad que haya en el agua, así como a las condiciones meteorológicas y del mar. «En el caso de un vertido de petróleo o de cualquier pérdida de carga peligrosa del portacontenedores implicado, la rapidez de la respuesta también será crucial para limitar cualquier impacto», dijo el vocero de Greenpeace.
Cianuro de sodio
El buque portugués Solong transportaba 15 contenedores con cianuro de sodio cuando chocó con el petrolero estadounidense.
La Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido describe el cianuro de sodio como un sólido blanco similar a un cristal, con un leve olor a almendra, que se utiliza en la industria para la limpieza de metales, el enchapado y la extracción, así como la fotografía.
La exposición a las sales de cianuro puede causar dolor de cabeza, náuseas y mareos, entre otros síntomas.
En los casos más graves, puede provocar problemas cardíacos y respiratorios o incluso la muerte, añade la agencia. El medio británico asegura que, hasta el momento, no está claro si el cianuro de sodio se ha esparcido en el agua o ha sido quemado, pero tiene el potencial de matar a los organismos vivos en el mar a través de la ingesta.
Especies en peligro
El medio especializado Climática, citando a Martin Slater, director de la organización medioambiental Yorkshire Wildlife Trust, asegura que el derrame del combustible podría ser «devastador para la vida salvaje del estuario del Humber» ya que muchos pájaros se reúnen en la costa antes de la temporada de anidación y hay «números significativos» de focas en el área.
Además, informa que la costa de East Yorkshire es hogar de colonias protegidas y significativas de aves marinas como frailecillos, alcas, alcatraces y gaviotas.