La decisión del presidente de EEUU, Donald Trump, de revocar los permisos de explotación de crudo en Venezuela ha generado reacciones divididas en el país.
Expertos advierten sobre las consecuencias económicas, no solo para Venezuela, sino también para Estados Unidos, mientras sectores de extrema derecha lo tildan de «maravilloso», contra el gobierno de Maduro.
Alejandro Terán, director de la Asociación Latinoamericana de Petroleros de Texas, fue enfático en su análisis: “Meter más sanciones a Venezuela es un autogol para EEUU«.
Según Terán, la revocación de la licencia de Chevron podría ser un error histórico similar al de 2019 cuando “Texas perdió gracias a las sanciones 125 mil millones de dólares”.
El petrolero, en exclusiva para Extra News, cuestionó el uso de las sanciones como medida de presión: “Las sanciones han sido el caldo de cultivo para que otros mercados emerjan y nos desplacen a los mercados originales que teníamos en esta zona del Caribe y Suramérica”.
A su juicio, estas medidas adoptadas por la administración estadounidense generan un riesgo para el equilibrio energético global: “Cerrar la puerta a Venezuela en este momento, cuando EEUU tiene un déficit de 4 millones de barriles de petróleo, sería muy riesgoso para el mercado norteamericano”, advirtió.
Una mirada similar la tiene José Brito, dirigente de Primero Justicia. En X (antes Twitter), Brito calificó la revocación como parte de un «tira y encoje» de los congresistas de Florida, describiendo el gesto más como un “autogol” que una victoria genuina.
El secretario general del partido Cambiemos Movimiento Ciudadano, Timoteo Zambrano, también se pronunció al respecto, alertando sobre la necesidad de unidad en el país.
«Los partidos democráticos tenemos que tener una reflexión profunda de qué hacer, cuál es nuestro papel, porque la República lo va a requerir. El gobierno no puede pretender imponer su política unilateral poder llevar este tema como una política de su partido, este es un problema que le toca a todos los venezolanos”, puntualizó el diputado.
En contraste, figuras como María Corina Machado se mostraron entusiastas con la decisión, calificándola como un «gran paso contra Maduro». Para Machado, la revocación de la licencia fue “maravillosa”, ya que considera que es un paso para debilitar el gobierno de Maduro.